Hoy hablamos sobre la influencia de la cafeína en el deporte y las consecuencias de su consumo. La literatura apoya la ingestión de cafeína para aumentar el rendimiento de resistencia aeróbica, aunque existen estudios controvertidos. Influye en gran medida la dosis y los hábitos de consumo, así como la intensidad y la duración del ejercicio a realizar.
En general, podemos decir, tras la revisión de varios artículos especializados, que la cafeína es una sustancia ergogénica, sobre todo para deportes de larga duración y de mediana y baja intensidad.
En concreto, un estudio noruego aclara que esta acción se debe a una disminución en la percepción del esfuerzo, lo que nos permite hacer más ejercicio, con mayor intensidad y a una frecuencia cardíaca superior.
Por este motivo, no se aconseja el uso indiscriminado de cafeína y se recomienda una evaluación médica previa que descarte la presencia de patologías psiquiátricas, neurológicas, cardiológicas y hepáticas, así como el uso de medicamentos que puedan interferir en el metabolismo y la absorción de la cafeína.
Además, se debe considerar no utilizarla en niños y adolescentes, ya que son considerados grupos de riesgo, y puntualizar que no es aconsejable tomarla una hora antes de hacer ejercicio.




